jueves, 8 de abril de 2010

Empresa tica sorprende a mercados cafetaleros por excelente calidad de su producto

En San Marcos de Tarrazú una familia de caficultores demuestra que es posible superar la crisis.

Y no solo salieron airosos, sino que sobrepasaron sus propias expectativas y ahora su grano de oro es famoso en países como Japón, Australia y también en Europa.

En medio de las montañas de San Marcos de Tarrazú está el beneficio de café Don Mayo, de lejos banderas de varios países se asoman.

Este es el segundo año consecutivo que el japonés Yoshi Kato viene hasta Tarrazú para comprar café Don Mayo, pues encontró algo que lo hace muy diferente al resto.

Así es, en medio de la crisis ellos siguen conservando un verdadero grano de oro: ¿cómo lo logran?, pues desde hace 5 años pasaron de ser cafetaleros a convertirse en un microbeneficio.

Su producción no es enorme pero la clave radica en producir pequeñas cantidades bajo estrictos estándares de calidad.

1 comentario:

  1. Hola compañeros; en la última clase de Análisis Económico les contaba sobre una empresa exportadora de café, la cual produce un café con los más altos estándares de calidad y que actualmente lo envían a Europa, Estados Unidos, Japón y muy pronto a Australia.
    Estos cafetaleros convirtieron su negocio en un micro beneficio, en el cual procesan el mismo café que cosechan en sus cafetales, los cuales son vigilados constantemente para obtener la mejor calidad.
    Café Don Mayo gano entre 120 participantes el premio a la excelencia, logrando que en la subasta un quintal de este café, fuera cotizado en $2.000.00 cuando en la actualidad se cotiza en $200.00.
    Creo que con esta noticia podemos contestar la pregunta de don Luis, NUESTRO CAFÉ SIGUE SIENDO TAN VALIOSO COMO EN LOS AÑOS 70s , nada más que debemos cambiar nuestra perspectiva y dejar de pensar que nuestro país ya no le puede sacar provecho a NUESTRO GRANO DE ORO, debemos poner las barbas en remojo ya que le hemos perdido la fe a los productos que salen de nuestra tierra y le creemos más a grandes empresas transnacionales que nos deslumbran con su nombre.

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